Me ha encantado éste florilegio topográfico (hala, me acabo de inventar un género literario) sobre una de las ciudades castellanas que más me gustan. La iglesia: la he visitado varias veces desde aquel lejano año que me quedé sola esperando a nadie, cuando pasaba por allí en dirección a Compostela.
Así que piedra, agua y en mi experiencia, soledad. Un otero.
Leerla entera. Creo que hay más -el artículo recoje otros enlaces al final de sus líneas-, y eso, que hoy hace frío.
Origen: Frómista: piedra y agua – Jot Down Cultural Magazine
——-ACTUALIZACIÓN: completamente recomendable leer las otras entradas de la revista dedicadas al románico.